Un canal desafortunado

Según publicó el periódico Hoy en portada y en su edición digital este miércoles, el Gobierno dominicano “inauguró” el martes un canal de televisión por Internet.

Desde ya, dicho canal ha merecido duras criticas de especialistas en Internet y televisión, que por no ser yo un experto en esas áreas no comentaré, pero ahí les dejo un vínculo con más información al respecto.

Previamente, el ministro de Información de la Presidencia, había informado que este canal tendría un costo operativo de 50,000 dólares mensual. Precisamente, la parte económica de este “nuevo” canal es lo que comentaré brevemente.

No hace mucha lógica, que teniendo el Gobierno un canal estatal como el CERTV de cobertura nacional y otro de cobertura limitada (Quisqueya TV), pero igual con potencial de ser usado, ahora se ponga en marcha otro vía Internet con programación distinta a estos dos.

Además es como dar un salto al vacío, porque la penetración de Internet en el país todavía es muy baja, y el ancho de banda al que tienen acceso la mayoría de los usuarios, no es el ideal como para ponerse a ver un canal de TV va la Red.

Se suma, que los que gozan de acceso a Internet (al menos permanente en sus residencias), en su gran mayoría son los que se ubican en los estratos más altos de ingresos, por lo que un canal en la red no serviría para educar a la población como pretende el Gobierno.

Sencillamente se trata de una pose más de Leonel Fernández y su ministro Rafael Núñez.

De nuevo, pienso que el proyecto correcto debe ser, tomar con seriedad los medios estatales con que ya cuenta el Gobierno, aglutinados en la Corporación Estatal de Radio y Televisión (CERTV), los cuales como se sabe, son “públicos” pero al servicio de la administración de turno. Deberían ser todo lo contrario, es decir, públicos pero al servicio del pueblo.

El desafortunado proyecto de República Dominicana TV, se suma a Antena, agencia de noticia oficial puesta con versión Internet. El proyecto de esta agencia se está implementando, de manera paralela al Centro de Información Gubernamental, que igual en la práctica funciona como si fuese una agencia de “noticias” de las instituciones oficiales.

En países como España, Francia e Inglaterra (con su emblemática BBC), los canales públicos son de los de mayor audiencia y gozan de credibilidad en sus programas de noticias. De manera, que en el caso dominicano, los medios estatales se le puede dar autonomía y pudieran competir con los medios privados, llegando incluso a ser proyectos comerciales sólidos.