Leonel lifeguard

Como el año pasado, este 27 de febrero, el presidente Fernández volvió a dar “cátedra” de la crisis internacional, intentando reducir los problema económicos locales a el impacto de la misma.

Leonel y el gobernante Partido de la Liberación Dominicana (PLD), han hecho habitual, atribuir los fracasos en materia económica a factores externos, mientras que los logros son fundamentalmente por la políticas “clarividentes” de quienes gobiernan.

De nuevo, volvió a ser alarde de que conoce el meollo de las finanzas internacionales, rebuscando términos prestados de autores famosos como el “capitalismo de casino”, y toda la práctica especulativa que él envuelve.

En su discurso, Fernández comparó la economía dominicana con el resto de la región, concluyendo, que la expansión del PIB dominicano fue la más alta con un 3.5%, aunque tuvo que reconocer que la misma se situó por debajo del comportamiento histórico. Pero como para darse ánimo, dijo que “debemos sentirnos más que satisfechos”, porque en medio de la crisis, República Dominicana, según él, tuvo el mayor crecimiento de la región.

Tuvo que reconocer la caída de los ingresos fiscales en 9% en el 2009, frente al 2008. Dato que utilizó para justificar el creciente endeudamiento público.

Al hablar de la deuda, volvió a comparar a República Dominicana con el resto de la región, señalando que la deuda externa se situó en 18.2% con relación al PIB al finalizar el 2009, lo que según Leonel se encuentra por debajo de la “generalidad” de los países de América Latina y el Caribe.

Pero omitió que este 18.2% se debe comparar con el 15.8% y 15.9% del 2008 y 2007 respectivamente.

Y pudo haber sido más específico y decir, que la deuda externa creció 13.5% en el 2009 con relación al año anterior, al pasar de 7,226 millones de dólares a 8,200, es decir, un incremento de casi mil millones de dólares.

Debió resaltar también, que en el 2007, la deuda interna era de 1,002 millones de dólares, y que él la llevó luego a 4,000 millones de dólares en el 2008, hasta terminar en 5,039 millones de dólares en el 2009.

El presidente Fernández debió seguir explicando el tema de la deuda y decir claramente que en el 2007 el total de la deuda del sector púbico no financiero era de 7,558 millones de dólares, y subiría a 11,226 millones de dólares en el 2008, terminado el 2009 en 13,239 millones de dólares. Pasando de esa manera, del 18.1% del PIB en el 2007, al 29% en el 2009.

Obvió mencionar también, que el presupuesto que su gobierno presentó al Congreso para este año, el cual fue aprobado sin ningún tipo de modificación, contempla endeudamiento por unos 115,000 millones de pesos, y que para este 2010, el 43% de los ingresos tributarios tendrían que ser utilizados para el pago de deuda.

Pero este crecimiento exorbitante de la deuda no preocupa al presidente Fernández, llegando a afirmar que su administración ha manejado con “prudencia” en el endeudamiento.
Fernández hizo alarde de keynesianismo, justificando con ello el déficit de 3.5% del PIB con que cerraron las finanzas públicas en el 2009. Pero olvidó decir que lo del déficit no es un problema del 2009 solamente, y muestra de ello es que desde el 2007 hasta el año pasado, las finanzas públicas acumulan saldo desfavorable por más 125,00 millones de pesos.

Pera a Fernández, el tener las finanzas públicas en rojo, es motivo de orgullo, y se consuela en el hecho, de que según sus datos, el déficit dominicano es inferior al de Estados Unidos, Europa y América Latina y el Caribe.

Hay que recordarle a Fernández que su sentimiento no es el mismo que sienten las autoridades del FMI, que le reclamaron a su gobierno el cerrar con un déficit por encima de lo previsto en el acuerdo stand-by.

Lo que si hay que reconocerle a Fernández y a sus funcionarios es su gran atrevimiento. Este atrevimiento es lo que le lleva a afirmar que “ha surgido un modelo dominicano de gestión de crisis”, y que él se muestra dispuesto a exportarlo.

Pero lo que debe incentivar el presidente Fernández, son las exportaciones del país, las cuales andan en números rojos, acrecentado el déficit comercial con el exterior, incluyendo a su principal socio comercial, Estados Unidos.

En resumen, para Leonel Fernández, mientras el resto de la humanidad sufre una profunda crisis que amenaza la estabilidad social, en estos dos tercio de isla, todo anda color de rosa, a tal punto que el desempleo no crece, comemos más, y por supuesto, más barato.

¡Que Dios lo perdone!